La sabiduría de los Aztecas

Hoy les dejo unas reflexiones que me encontré en un librito títulado "Lo que nos susurra el viento" supuestamente escrito por un indígena azteca llamado Xokonoschtletl, que traducido su nombre es: aquel que tiene raíces muy profundas y se alimenta de ellas.

"Las personas que no hacen más que trabajar no tienen tiempo para soñar. Pero sólo el que sueña encuentra la sabiduría. Los sueños son muy importantes para nosotros los indios. El hombre blanco no lo entenderá, pero en los sueños las medicinas hablan al sanador de su poder, en los sueños sabemos el nombre que habremos de llevar, en los sueños se anuncian acontecimientos, en los sueños recibimos mensajes, en los sueños nos hablan los espíritus."

¡Hay que aprender a soñar!

"No llevéis ira en el corazón y no alberguéis rencor contra nadie. No penséis siempre sólo en vosotros mismos y en vuestra propia generación. No olvidéis que vosotros seréis los antepasados de muchos antepasados de muchas generaciones. Pensad en los hijos que os sucederán. Pensad en aquellos que aún no han nacido y cuyos rostros aún están oculto en el seno de nuestra Madre Tierra. Pensad en ellos en todo lo que hágais."

"¡Las calles de vuestras ciudades son tan luminosas! ¿Es que tenéis miedo a las estrellas? ¡Vuestra música es tan ruidosa! ¿Es que tenéis miedo al susurrar del viento? ¿O quizá es que tenéis miedo de vosotros mismos?"

Y el mejor de todos:

"Cuando vuestros antepasados llegaron hasta nosotros, vieron un metal amarillo que había en abundancia entre los Aztecas. Lo que para nosotros significa "sudor del Sol", ellos lo llamaron oro. Sus ojos se abrieron codiciosos, saltaron y cantaron de alegría. Pobres, no sabían que el oro no se come".