domingo, septiembre 26, 2004

Maldita sea!

No creí que me fuera a afectar tanto la indiferencia de Cíclope. Me siento triste, mal... extraño! Sé que se me pasará; sé que algún día volveré a leer estas lineas y me diré que no era para tanto. Aún así hoy siento que mi fortaleza, de la que tanto presumí en días anteriores, se me va! ¿Dónde habrá quedado? Me odio por ser tan débil...

No hay comentarios.: